Día 8. La huerta de Escocia - 22 julio 2008

Después de dormir dos días seguidos en el mismo sitio era hora de continuar el viaje hacia el norte.

Primero visitamos el castillo de Stirling, al que le pasa lo mismo que al de Edinburgo... y es que son demasiado modernos para mi gusto. También este de Stirling es más pequeño, así que no me atrajo demasiado.

Como siempre, íbamos justos de tiempo, así que decidimos no visitar el monumento a William Wallace. Es una torre a la que se puede acceder y dentro hay un museo de sobre los "Héroes de Escocia". Nos conformamos con verla desde el castillo de Stirling.

Seguimos hacia el norte y me empeñé en atravesar Perth, porque había visto un par de fotos del lugar que me habían gustado. Llegamos al sitio y dimos unas vueltas con la moto mirando algún edificio chulo. Llenamos el depósito (estaba barato, sólo 1.44€/l) y seguimos adelante.

Los paisajes de esta zona se parecen bastante a los de Castilla: terrenos vagamente ondulados, campos de trigo y cebada, largas rectas con alguna curva suelta, poco tráfico y bastante calor. Las cunetas... bueno, las cunetas no, que no hay. Los bordes de la carretera estaban salpicados por letreros que anunciaban frambuesas, fresas y "potatos" (patatas grandes), que te las podías coger tú directamente del huerto.

Esto de los anuncios en las cunetas es bastante típico en toda la isla. Desde Dorset hasta arriba fuimos encontrando "Free Range Eggs" (huevos caseros, traducido libremente), "Free Range Butter" (mantequilla casera), fruta, kioskos de café y sandwiches, e incluso alguna moto en medio de ninguna parte.

Hicimos camino hacia el Glamis Castle, castillo que sale en los billetes escoceses y lugar donde se crió la reina. Se trata de una visita guiada por los salones del castillo y es muy recomendable.

Tras la visita seguimos hacia el Dunnotar Castle, al lado de Stonehaven. Para ello recorrimos un trozo de autovía antes de unirnos en Johnshaven a la carretera costera, muy recomendable por sus paisajes. Se hace difícil ver el Mar del Norte ahí al lado y no ver ninguna ola.

Otra curiosidad de la isla son las autovías (highways) que se diferencian claramente de las autopistas (motorways) que son a lo que nosotros estamos acostumbrados. En las autovías hay rotondas, entradas y salidas con exiguos carriles de aceleración, e incluso hay cruces en los que para girar a la derecha (recordemos que vamos por la izquierda), te colocas en la mediana y cuando no viene nadie (preferiblemente) te cruzas los dos carriles del otro sentido para meterte en la salida de ese lado. Al principio asusta, pero luego ves que nadie hace cosas raras y que no tiene por qué pasar nada.

No entramos en el castillo porque no nos valía el pase y sólo eran ruinas. Así que después del cansancio de bajar casi hasta la playa para subir al castillo y dar la vuelta, nos sentamos a comer el "lunch", que ya eran las 4 de la tarde.

Cruzamos Stonehaven y seguimos hasta el Crathes Castle, pero ya no dejaban entrar. La carretera de Stonehaven a Crathes está muy bien, muy retorcida, aunque con bastante tráfico y alguna que otra alcantarilla en el medio. En Crathes te unes a la A93 que viene de Aberdeen que es mucho más ancha y rápida, pero también con buenas curvas. Como era de esperar nos cruzamos con bastantes motos.

Como queríamos ver el castillo y era tarde decidimos acampar por allí cerca y visitarlo por la mañana. En las inmediaciones de Banchory buscamos un camping con cabañas que tenía fichado en el gps. Y buscándolo, dando la vuelta en un cruce nos volvimos a caer del mismo lado. Esta vez me dio tiempo a decir que nos caíamos, y los dos pudimos saltar y aterrizar de pie cual gatos. Después de los juramentos inspecciono otra vez la moto, pero con peor suerte: la maneta del freno se había roto. Que tenía suerte me decían... pues menos mal.

Compruebo que aún con la maneta rota puedo frenar con los dos dedos de siempre, así que no me preocupo en exceso y seguimos buscando el camping (el gps no es que sea muy preciso a veces). Al final lo encontramos y por 20£ (25€) nos alquilan la cabaña. Nos parece baratísimo en comparación con los hoteles y B&B.

Tras eso nos instalamos y bajamos rápidamente a Banchory a comprar viandas para acompañar al chorizo de Burgos que traíamos. Unos platos precocinados de meter en el horno, algo de pan, queso, jamón york, Caffreys, Tennent's Super... En lo poco que circulamos por el pueblo no encontramos nada de especial interés, y así nos lo confirmó la guía de Escocia que llevábamos. Así que nos volvimos a la cabaña.

Jornada: 270km.

Comentarios

  1. Hola!
    2 comentarios.

    1. Free range viene a significar que los animales no están estabulados. O sea que las gallinas y vacas campan a sus anchas (bueno, lo que les dejen :)

    2. Highway significa simplemente carretera o vía.
    Lo que describes es una "Dual carriageway" que es una carretera convencional con 2 carriles. Es algo que en España se ve muy poco.
    Yo sólo me acuerdo de la nacional que va de Logroño a Zaragoza ¿N120? que antes de llegar a Zaragoza tiene 2 carriles, pero sigue siendo carretera convencional.

    Sigue con la serie, que estoy enganchao :-DD

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  2. Hola FGP,

    Gracias por la aclaración, se te ve muy puesto en el tema desde que te fuiste para allá. ;-)

    Cuando estando allí tuve que deducir lo que era "Free Range Egg" me imaginé algo parecido a nuestro "Pitu Caleya", por lo que deduje que fuesen huevos de gallina "suelta". Parece que no me equivoqué, aunque dijese "huevos caseros" a eso me refería.

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  3. ¡Qué recuerdos cuando recorrí la zona en coche en el 2004! Tenía reservada una habitación en un B&B pequeñito por la zona del castillo de Fraser. Se hizo de noche y llovía, y había niebla por la estrecha carretera que pasa al lado del castillo. Veía ranas cruzar la carretera delante mío, y sin saber dónde estaba exactamente la casita del B&B (no tenía GPS ni nada). Y ví una luz a lo lejos...

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